Educación Financiera desde la infancia para Guanajuato
Pensando en mi pequeña Natalia, por el día de la niñez.
La gran mayoría de las decisiones que todas y todos tomamos de manera cotidiana tienen alguna repercusión, ya sea directa o indirecta, dentro de las finanzas personas y/o familiares. Por ello, resulta indispensable que las y los guanajuatenses tengan acceso en edad temprana a programas educativos que contemplen a la educación financiera.
De acuerdo con la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), la educación financiera puede definirse como: “el proceso mediante el cual los individuos adquieren una mejor comprensión de los conceptos y productos financieros y desarrollan las habilidades necesarias para tomar decisiones informadas, evaluar riesgos y oportunidades financieras, y mejorar su bienestar”.
Según el Banco Mundial, la inclusión financiera posibilita a las personas físicas y morales a que puedan acceder a diversos productos financieros que les sean útiles y asequibles para satisfacer sus necesidades y que sean utilizados de una manera responsable y sostenible. De acuerdo con el Banco Mundial, el acceso a la inclusión financiera ayuda al cumplimiento de 7 de los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible contemplados dentro de la Agenda 2030.
La importancia de la educación financiera es tal, que diversos países del mundo han impulsado distintas políticas públicas para que las y los ciudadanos puedan acceder a una educación financiera sólida y de calidad.
En la revisión de buenas prácticas de educación financiera que se han incorporado en distintas regiones del planeta, destacan: Alemania, España, Francia, Italia, Reino Unido o Suecia, con resultados concretos para que las infancias y juventudes tengan acceso a programas de educación financiera a fin de que quienes hoy estudian puedan desarrollar el día de mañana emprendimientos sustentables y exitosos con las herramientas que adquieren desde los primeros años de su vida.
En este sentido, resulta evidente que dichas herramientas podrán ser de suma utilidad dentro del desarrollo económico de nuestro estado.
El artículo 15 de la Ley de Educación para el Estado de Guanajuato contempla en su fracción VII el desarrollo de la cultura financiera como uno de los objetivos del proceso educativo, pero resulta necesario dotar de los mecanismos necesarios a las y los educandos a fin de que estos puedan formarse en conceptos específicos de la educación financiera tales como ahorro, ingresos, gastos, inversión y endeudamiento.
En este sentido, debe incorporarse un enfoque integral en la educación financiera de las y los educandos de nuestro estado a fin de que en el futuro cuenten con las herramientas necesarias para tener finanzas sanas tanto a nivel personal como en el ámbito empresarial.
Por ello, se propone adicionar un Capítulo III Bis, que contempla la adición de un artículo 28 Bis a la Ley de Educación para el Estado de Guanajuato, a fin de que se incorporen a los programas de estudio de educación básica buenas prácticas inspiradas en las adoptadas a nivel internacional sobre la educación financiera, entre otras, la capacitación constante y materiales didácticos especializados y actualizados.
También, la posibilidad de que el sector educativo celebre convenios con instituciones públicas o privadas a fin de que contribuyan al desarrollo de las habilidades en la educación financiera de las y los educandos.
Del mismo modo, se propone reformar el artículo 103 del mismo ordenamiento para establecer programas educativos complementarios que consideren contenido financiero y económico en el esquema básico para lograr una formación integral de las y los guanajuatenses que cursan esos niveles educativos.
El próximo sábado, celebraremos a la niñez guanajuatense. No ignoramos la situación de precariedad y violencias que viven las infancias de todo el país y también en Guanajuato, y esta iniciativa no pretende ser ajena a la realidad de las niñas, niños y adolescentes más necesitados, sino acercarles a todos a otra realidad posible.
El futuro se construye hoy.
Además del derecho a la vida, la educación, la alimentación, la salud, el agua, la identidad, la libertad y la protección, nuestras infancias tiene derecho al desarrollo sostenible y deben tener también el derecho a no ser pobres.